Recorrimos la ruta de la marató de Collserola coincidiendo con la fiesta de Sant Medir, así que esas dos almas nos encontramos con una buena cantidad de gente que subía a la ermita desde Sant Cugat por la mañana.
Ya avanzada la tarde y mientras hacíamos el camino de vuelta, disfrutamos el placer de bajar el monte a ritmo de unas sardanas que nos llegaban desde el aplec, entre las cuales reconocimos el «You’re the one that I want» y el «Libre» de Nino Bravo, que hasta quedaban bien y todo en su versión sardanera.
Puesto que pasábamos cerca, subimos hasta la ermita donde aún tuvimos tiempo de comprar algunos caprichos, e incluso nos encontramos con esta rara aparición en medio de la montaña:
Personalmente aproveché la rareza del evento y me pedí una de patatas fritas, que me pareció lo más simple y saludable que había entre la mercancía churreril. El dependiente lo consideró demasiado simple y decidió adornarlo tal que así:
Así que ignoré todos los mensajes de alarma que me lanzaba el cuerpo, y me dediqué a darle un gusto al paladar. Mi compañero me ayudó en la tarea de desintegrar las patatas, claro. :)
Aparte del encuentro con lo de Sant Medir, tuvimos otro día primaveral sin frío ni calor, excelente para caminar. Ah, y disfrutamos de una gustosa parada larga para comer en el pantano de Vallvidrera.
Estadísticas:
- Total: 44,1 Km en 10:39 ; 4,14 Km/h incluyendo paradas (1:11)
- En movimiento: 9:28 ; 4,66 Km/h